Vía verde

12,9 km



Teníamos muchas ganas de colgar esta ruta. Por muchos motivos.
Una ruta que comienza en la avenida de la estación, donde se alojó la terminal del ferrocarril durante muchos años y que luego desapareció. Un lugar especial por donde pasear, caminar y correr fuera del asfalto en pleno corazón de la ciudad que nos va llevando fuera de ella siguiendo la hoy inutilizada vía ferroviaria por un sendero todavía cuidado gracias al trabajo desinteresado de personas comprometidas con la protección de este espacio. También reivindicación para la creación de una verdadera vía verde cuyo mantenimiento debería correr a cargo de la administración.
La creación y mantenimiento de este tipo de rutas que facilitan el contacto con el entorno natural cerca de las ciudades invitan a la práctica del ejercicio físico saludable. En este caso con el componente añadido además de recordar lugares y también personas que tuvieron una importancia crucial en nuestra historia como barbastrenses.





Vamos con la ruta
Partimos del Centro de Congresos y accedemos de inmediato, cruzando el paso de peatones y trepando un pequeño terraplen a un tramo muy agradable que transcurre paralelo a la carretera, por encima de ella. En un momento nos encontramos corriendo por un sendero bien marcado, al lado de las vieja vía cubierta de vegetación y todavía dentro de Barbastro. Llegamos al barrio de San Valentín y de allí salimos dirección sureste.
Hay tramos asfaltados que se combinan con otros de senda al lado de los raíles, siempre paralelos a la carretera que va al polígono industrial


Pasados 3 km llegamos al viejo túnel que debemos atravesar. Uno se imagina a la antigua "Burreta" atravesándolo en su entrada y salida de Barbastro.
Al poco de salir del túnel tenemos que abandonar el camino que recorría esta legendaria máquina para tomar un desvío a nuestra izquierda y pasar por la parte inferior de un pequeño grupo de pinos que nos dejan al pie de los túneles que nos permitirán atravesar por debajo de la carretera.
Tres túneles pequeños, un viñedo junto al polígono y otra vez a nuestra izquierda a un túnel algo mayor. Al salir, giro a la derecha -si seguimos de frente nos vamos a la pasarela del Vero y al camino de la Boquera- que nos lleva a una larga y exigente subida de medio kilómetro paralela a la carretera que culmina en el alto de la Almunieta.


Desde este punto hay que buscar la senda paralela a la carretera, y continuar en dirección a Castejón del Puente.
En algún punto el camino desaparece bajo el sembrado pero eso no impide visualizar el evidente trazado que llega prácticamente recto hasta la altura de lo que fue Transportes Aragón. En ese punto girar a la izquierda, hacía una granja y a los pocos metros a la derecha. Entonces veremos la entrada a nuestro objetivo. La trinchera por donde pasaba el tren. Un pequeño desfiladero de roca de apenas 500 metros cubierto de vegetación y por el que podemos pasar corriendo sobre las traviesas gracias de nuevo a la labor de limpieza de algunas personas muy involucradas en que algún día este trayecto sea considerado como se merece y reciba los cuidados necesarios para ser transitado sin dificultad.



Siguiendo el camino, al salir del desfiladero ya veremos Castejón. Nosotros hemos dado la vuelta a los 6,5 km desde que salimos, justo al final de la trinchera.
Al volver y salir del mismo, dirección ya hacía Barbastro, el Pirineo se abre en el horizonte y solamente tenemos que volver sobre nuestros pasos.




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1 comentario:

  1. Merece la pena continuar corriendo por la gran recta de 7km. que empieza en la estación de Castejón del Puente y llega hasta la Armentera, 7km. en llano y bastante interesante.

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